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MANUAL DEL AMOR LINDO

Hay muchas clases de amor, de eso no hay dudas. Pero yo no quiero entrar a definir el amor como tal; es decir el amor integral porque este es indefinible. Tampoco quiero sentar una teoría determinante porque este tipo de posiciones radicales no caben dentro del amor, puesto que él es en esencia muy flexible.

A lo que me voy a referir es al “Amor Lindo” una especie muy particular que se encuentra única y exclusivamente en el sexo femenino. Te aclaro: el “Amor Lindo” reside sólo en las mujeres, y no para ellas, sino para darlo; porque como todas las otras especies de amor, existe sólo para ser dado. No como una posesión; no como un trofeo.

Te dije que el “Amor Lindo” reside en el sexo femenino, pero sería más acertado si te digo que está latente en ellas, esperando ser entregado a alguien. Las mujeres no saben siquiera de su existencia y esta ignorancia las perjudica porque si tuvieran conciencia de la importancia que implica poseer el “Amor Lindo” todo sería muy distinto.

Cuando un hombre observa a una mujer, muy adentro, en su subconsciente, se está preguntando ¿tendrá esta mi “Amor Lindo”? porque esencialmente es lo único que el hombre va buscando en la mujer.

Si te fijas bien, todas las mujeres, si quieren, pueden ser tiernas, comprensivas y hasta apasionadas con cualquier varón. Pero su tesoro, el “Amor Lindo” no se lo pueden dar, ni aún queriéndolo, a cualquier hombre. Porque existe una condición inmodificable que te voy a explicar con un ejemplo:

¿Has observado a un candado con su llave?

¿Te has dado cuenta de que una y sólo una llave puede abrir el candado?

Similarmente la mujer únicamente puede dar su “Amor Lindo” a un sólo hombre, es decir que como las palomas nosotros también nacemos en parejas, pero en momentos y sitios diferentes…

Eso sí, que esto no te confunda con la idea de que existen las “Almas Gemelas” porque la realidad no es ésta. Lo que existen son las “Almas Dispares” es decir distintas pero acopladas en su totalidad.

Míralo de esta forma: retomemos el ejemplo del candado con su llave. Te pregunto ahora ¿Podría decirse que son gemelos? O que ¿Se parecen en algo? La respuesta es ¡No!; No hay cosas tan diferentes ¿Cierto? Pero se acoplan internamente de tal forma que la existencia del uno sin la existencia del otro es simplemente absurda o sin sentido.

Un hombre sin el “Amor Lindo” está vacío mientras que una mujer siempre está completa pues es ella quien lo posee y lo puede dar. Pero cuando no les ha sido posible entregarlo, sienten un “Sin sentido” en su vida lo cual les causa una inquietud que no les permite estar tranquilas ¡Ni en sus momentos más felices!

Espero que no confundas lo anterior con las relaciones físicas de las parejas porque el “Amor Lindo” no tiene nada que ver con sexo.

Aunque sería todo un prodigio imaginarse lo que sucede cuando una pareja de “Amantes Lindos” hace el amor… !waw!

Las mujeres no pueden darse el lujo de escoger a quién dar su “Amor Lindo” porque primeramente ya te dije que ellas no saben que lo poseen y en segunda instancia aun cuando lo supieran, éste se regala solo. Únicamente, exclusivamente a quien debe darse. Y lo más bonito es que la voluntad no tiene nada que ver con esto. De tal forma que ella no puede ni regalarlo a quien no debe; ni negárselo a quien debe darlo. Porque la fuerza de este amor es como una avalancha en su momento más crítico.

Aquí te voy a regalar unas señales que te permitirán saber dónde está tu “Amor Lindo”:

PRIMERA SEÑAL

Tú ya conoces a quien darás tu “Amor Lindo” o quién te lo dará (según el caso que seas: mujer u hombre) porque Dios todopoderoso te puso una foto de esa persona en tu corazón y una foto tuya en el corazón de ésa persona de tal forma que cuando se encuentran la primera sensación es que se conocen desde hace mucho, mucho tiempo; y esto es verdad, es toda una eternidad, porque en realidad somos Adán y Eva, los mismos del Paraíso. Lo único es que ahora tenemos otro nombre y no hay paraíso…

SEGUNDA SEÑAL

Si se alejan aunque sea un poco, sienten como si les faltara algo: un brazo, una pierna, un ojo… y es así porque una vez que se han encontrado se completa un código y se abre la talanquera que sujeta al “Amor Lindo” y este se divide en dos partes iguales; una se queda con ella y fluye hacia él y otra se queda con él y fluye hacia ella. Es por eso que se siente ese vacío porque el código sólo funciona cuando está completo, es decir cuando están juntitos… ¡Qué lindo! ¿verdad?

TERCERA SEÑAL

La sensación que experimentan cuando se encuentran juntos es indescriptible pero tataré de darte una idea: Imagínate una tarde soleada pero fresca, con una brisa suave que te acaricia y teniendo como fondo un paisaje precioso con un lago de tranquilas y azules aguas con una montaña nevada más allá y bajo tus pies una grama verde que te sirve de tapiz; se respira un delicioso aroma de distintos perfumes de flores entremezclados y como si esto fuera poco múltiples pajarillos cantando sus más tiernas melodías…

Es necesario aclararte que ese espacio es imaginario y que tú puedes estar en cualquier lugar, que si ya encontraste a tu “Amor Lindo”, hasta estando en un basurero te sientes en el lugar que te describí antes. Y es que el lugar no importa realmente porque todo es subjetivo.

Como puedes ver en este amor todo es lindo, de ahí su nombre. Por esto, las bajas pasiones como el odio, el rencor, la venganza, el resentimiento, los celos, la traición y otros sentimientos de esta misma especie, no tienen cabida en una relación bendecida con el “Amor Lindo” y el único objetivo de la pareja es darse mutua felicidad.

Debes tener la seguridad de que lo que te he dicho antes es cierto y que no debes rogarle a nadie que te acepte o te dé el “Amor Lindo” según sea el caso porque este amor no conoce dudas ni temores y una vez que se ha completado el código, no hay fuerza conocida que pueda detenerlo; se da porque se da.

Hay algo más que te quiero aclarar y es el hecho que el “Amor Lindo” no puede ser estudiado ni analizado porque su forma no lo permite. Él simplemente existe y sólo soñando lo podemos percibir (si no te ha llegado en la realidad) y como soñando no estamos conscientes, al despertarnos no estamos seguros de nada…lo verdaderamente hermoso es descubrirlo cuando ha llegado a nosotros…

El “Amor Lindo” fluye por su misma naturaleza espiritual. Es un crimen tratar de poseerlo, de atraparlo, de enjaularlo. No cometas semejante error. Lo que debes hacer es dejar que fluya y su reflujo te llenará de felicidad aunque no lo desees; porque como ya te dije la fuerza de este amor es incontenible.

Nunca trates de encontrar el “Amor Lindo”, sólo espéralo y él te encontrará a ti. ¡Ah! y jamás le preguntes a alguien si te ama porque esa pregunta no es necesaria; es más, esa pregunta es necia y quien la hace siempre debe merecerse un NO por respuesta. Porque en las palabras suele esconderse la mentira y cualquiera puede fingir un sí. Date cuenta de que el amor no se puede ocultar, no se puede esconder, no se puede disimular y siempre emerge, se hace evidente, sale a flote o como lo quieras decir pero en todo caso nunca puede permanecer en secreto. Óyeme bien: NUNCA. Y no se necesita ser clarividente o muy sensible para darse cuenta de su existencia; porque cuando hay amor ¡Hasta un ciego lo puede ver! Si esto no fuera cierto, ¡Los ciegos no conocerían el amor!

Ahora te voy a contar algunas historias de la vida real, historias de personas como tú o como yo que cuando quieras te las puedo presentar. Sus nombres han sido deliberadamente cambiados por razones obvias…

POSESIÓN

Paula era una muchachita muy hermosa que tenía un misterioso atractivo para los hombres. Su vida transcurría casi normalmente porque siempre se aparecía alguno que trataba de enamorarla, de poseerla… Esto último en el sentido real de la palabra porque ella era en verdad muy bella: de una deliciosa piel canela que invitaba a ser tocada, a ser besada; sus suaves y lustrosos cabellos podían dramatizar los enredos de la vida (y por cierto ya lo habían hecho muchas veces); aunque no era alta, en verdad no lo necesitaba porque en su conjunto daba la sensación de ser perfecta, de no tener nada malo; su sonrisa encantadora y su voz pausada y entonada complementaban esa obra maravillosa del Creador…

Cuando Paula conoció a René, no se imaginó que él le plantearía uno de los mayores dilemas de su existencia; a pesar de que se jactaba de conocer bien a los hombres, no supo cómo llegó a entregarse tanto a él al grado de no poder vivir sin su compañía. Ella pudo haber jurado que era a él a quien tenía que entregar su “Amor Lindo” pero no era así y él se encargó de hacérselo saber de la siguiente manera:

Cierto día, después de una disputa y una corta separación, René le condicionó la permanencia a su lado con estas palabras “Pruébame que me amas tatuándote mi nombre en tu nalga”

Paula pensó que se trataba de una broma y soltó una de sus esplendorosas carcajadas. Su rostro sonreído era aun más lindo puesto que se le marcaban unos hoyuelos en las mejillas y le preguntó como en broma ¿Tú estás loco?

Él con cara de haber perdido un gran capital de dinero le dijo: No, no estoy loco y lo que te he dicho va en serio.

La esplendorosa sonrisa se regresó por donde había llegado y su lugar fue ocupado por un gesto de profunda tristeza cuando le dijo:

Sabes qué René: yo te amo mucho, eso es verdad. Por ti habría sido capaz de cualquier cosa así fuera una locura; con tal de complacerte y tenerte a mi lado, pero lo que me acabas de pedir es sencillamente inaceptable y no sabes cuánto me duele escucharlo porque éso lo único que demuestra es que no me amas como dices y que eres capaz hasta de violar mi individualidad con tal de saciar tu egoísmo. ¡Me siento violada! Y sin embargo me alegro de poder ver las cosas con claridad porque ahora sé que no me amas y que “nuestro amor” sólo lo siento yo. Si quieres marcar a alguien cómprate una vaca y ponle tu nombre por todas partes porque en mi cuerpo no lo vas a ver tatuado ¡Nunca!

Verdaderamente no importa lo que pasó con ellos como pareja pero ten en cuenta que en el “Amor Lindo” uno no se siente dueño de la otra persona, simplemente siente que le pertenece a ella. Y eso también es de ida y de regreso como todo en el “Amor Lindo”.

TRAICIÓN

Veinte años de amor sometido a todas las pruebas posibles le daban la seguridad a Pedro de que Mariela lo amaba de verdad; y si él hubiera sabido de la existencia del “Amor Lindo” hubiera podido jurar con la mano sobre la Biblia que ella poseía el suyo. Pero no era así porque bastó que ella conociera a Anselmo para que se olvidara de todo lo que juraba sentir por Pedro. Anselmo era un hombre rústico que por ningún motivo debía preocupar a Pedro.

Anselmo le explicó a ella que no era feliz y que siempre había sido desdichado en el amor y ella se sintió su heroína y salió al rescate, a darle a Anselmo “Lo que tanto necesitaba”. Y se lo dio con dulzura primero y con pasión después sin pensar en Pedro que no veía más que por los ojos de ella…

Largos meses duró esta situación hasta que por aquella promesa Bíblica que dice que “No hay NADA oculto que no haya de ser manifestado y puesto en evidencia” Pedro se enteró de lo que estaba pasando.

Aunque ella le juraba a Pedro que lo amaba él no podía creerle porque ¡Los hechos son más contundentes que las palabras! Y tampoco porque ella le juraba que no sabía por qué lo había hecho, él le creyó, aún sabiendo que el demonio es poderoso y que utiliza a las personas para saciar sus perversidades. Lo que sí habría podido sacar en claro era que ella no tenía su “Amor Lindo” porque la traición es la muestra más contundente de la no existencia de dicho amor.

PERFECCIÓN

En un tugurio cualquiera de cualquier ciudad de América, viven Erica y Manuel. El se dedica a cuidar los carros de un parqueadero que de manera espontánea se formó en uno de los sitios concurridos de la ciudad. La necesidad lo obligó a improvisar su empleo, y sólo vive de las monedas que le regalan los dueños de los carros que el “cuida”.

Por las noches llega a su casita de cartón y de madera donde lo espera Erica con los pocos alimentos que ha podido comprar con las monedas que le dejó la noche anterior. Apenas se observan en la semi penumbra del barrio, algo mágico ocurre y una luz salida no se sabe de dónde comienza a iluminar toda la casa. Casi sin pronunciar palabras, se establece una comunicación entre ellos que podría catalogarse como telepática. Sus miradas encontradas lo dicen todo; no hay secretos que esconder. Se pertenecen mutuamente al cien por ciento. Consumen sus alimentos y agradecen al Señor por los beneficios recibidos.

No tienen un hijo porque aún no ha habido tiempo para ello, pero un hijo no es lo único que les falta porque en realidad no poseen nada: sólo se tienen el uno al otro, pero se les ve muy felices porque para ellos, el hecho de tenerse es suficiente para estarlo…

Debes aprender que la felicidad en la vida no tiene nada que ver con cantidades de dinero, tampoco tiene nada que ver con no tener ningún problema. La felicidad de una pareja consiste de verdad en resolver juntos todos los problemas que se les puedan presentar. El dinero es sólo un accesorio, algo agregado que puede adornar la felicidad, hacerla más atractiva pero hasta ahí.

Bonito es en una pareja, al final del camino, hacer un balance y darse cuenta de cuántos problemas pudieron solucionar juntos y conocer la satisfacción que da el saber que ninguno de ellos logró separarlos.

DISPARIDAD

Hay muchas cosas que la gente no logra entender. Una de ellas es la forma como se manifiesta el amor.

Te has preguntado alguna vez al observar a una pareja: ¿Qué le vio ella o qué le vio él para que se vean tan juntitos y felices?

Algunos dicen tratando de encontrar una explicación lógica que “El amor es ciego” pero eso no es así te recuerdo que Dios es amor y te puedo asegurar que todo lo ve. Lo que ocurre es que el amor verdadero va más allá de la forma física. Él se alimenta de lo espiritual y eso hay que entenderlo espiritualmente y no con el intelecto.

Antonio y Sofía no sólo eran muy dispares en su aspecto físico: mientras ella era hermosa y linda, el era regordete y feo; pero tuvieron la dicha de encontrarse en la vida y de ser Amantes lindos. Si tú los hubieras observado podrías haberte dicho: “Nada hay tan próximo a la bella y la bestia”. Pero eso como te dije es sólo en la forma porque en su interior la felicidad, la compatibilidad y la armonía son los comunes denominadores. Ellos por separado no son nada extraordinario pero juntos son claro ejemplo de lo que es la perfección.

* Franco había vivido muchos años con muchas mujeres y nunca se sintió completo. Siempre hubo algo que lo hacía pensar de una manera inconsciente que ésa no tenía su “Amor Lindo”.

En su largo discurrir por la existencia había dejado retoños de su vida por doquier y a sus setenta y ocho años vio por primera vez a Irene Segunda y sintió que algo ¡lo impulsaba a perseguirla!

Con toda la experiencia de sus años y con la paciencia que da la esperanza ya perdida, se dedicó a conquistarla aún sabiendo que eso violaba todas las reglas establecidas al respecto por la sociedad. Pero él se preguntaba ¿Hasta qué edad tiene derecho una persona para buscar su felicidad? Esa es una pregunta a la que sólo el silencio puede dar satisfactoria respuesta.

Aunque todo el mundo se le vino encima; aunque las personas que en todo se meten les daban razones poderosas para que se separaran; mucho más poderoso era el “Amor Lindo” que ella tenía para él y nada podía separarlos. Sólo la muerte ¡Por ley Natural!

Irene no parecía tener la fuerza suficiente para soportar las presiones, pero el “Amor Lindo” se las dio y a pesar de sus veintiún años pudo encontrar en aquel hombre que bien podía ser su abuelo a aquel a quien debía entregar su “Amor Lindo” y sin saberlo, para ella esa era la razón más poderosa que pudiera encontrar.

TIEMPO DE CALIDAD

Las mujeres dentro de su equipamiento para la vida poseen "un programa" que les permite colocarse justo lo que atrae a los hombres. No logro entender cómo lo hacen pero es así. Un claro ejemplo de lo que trato de decirte es la moda que llevaba puesta Mery el día que Joel la conoció. Una falda de tela jean no muy larga ni muy corta pero que en su parte superior, tal vez en los últimos siete centímetros tenía como complemento una tela transparente que permitía ver con absoluta claridad su prenda íntima, pero no toda ¡Sólo un pedacito de ella!

Eso es suficiente para volver loco a cualquier hombre común.

Ella no llevaba puesto un “Hilo dental”, déjame aclararte, su “Pantie” era en lo que se veía un encaje negro en la parte que debía tener elástico.

En realidad Joel en lo único que se fijó fue en que ese precioso y afortunado encaje se encontraba un poco doblado en un pedacito. Y él pensó en lo dichoso que sería si pudiera ¡Arreglarlo!

Ella como sintiendo el peso de su mirada, se detuvo y haciendo alarde de leer el pensamiento le dijo a Joel mientras pasaba a su lado “eso no es nada que no se pueda arreglar”. Y diciendo esto metió sus dedos en la falda y se haló la pantie hasta acomodarla. Mientras Joel casi paralizado preguntó:

¿Cómo supiste lo que estaba pensando?

Ella le respondió: “No sé cómo, pero me pasa a menudo”.

Se miraron y fue allí donde se completó el código…

Se quedaron allí mismo parados y hablaron largo rato, luego él le preguntó: ¿Te gustaría casarte conmigo?

Esa era una pregunta inesperada si se tiene en cuenta que sólo hacía un rato que se conocían.

Ella le dijo: Me gustaría pero no puedo.

El la miró esperando una justificación y ella complementó: ¡Tengo Sida!

Cualquiera otro habría salido corriendo, pero él le dijo: con mayor razón puesto que no hay tiempo que perder.

Y en verdad no lo perdió preguntándole cómo se infectó ni nada de eso. Así que ella no tuvo que decirle que por ser enfermera se había pinchado con una aguja que estaba contaminada. Eso no tenía importancia…

En el “Amor Lindo” todo el tiempo es de calidad, eso es lo que vale; pues es mejor vivir un año de felicidad, que festejar unas bodas de plata plagadas con todas esas cosas que te mencioné antes y que son los enemigos del “Amor Lindo”.